Césped natural de Agrocesped. Libre de malas hierbas. Uso de tratamiento especializado de malas hierbas. Rollos de Césped natural en tepes de calidad.
La mala hierba o maleza la podemos definir como aquella planta o hierba que crece en un sitio no deseado y donde tenemos previsto sembrar otras variedades en concreto. Existen diferentes tipos de malas hierbas: de hoja estrecha y de hoja ancha. Las podemos eliminar de forma manual, arrancándola con la mano (de raíz al ser posible) y, también, con herbicidas.
Por un lado, este tipo de hierbas nos dan una sensación de abandono y de un césped débil, y compiten con el césped por el agua, el sol y los nutrientes que le aportemos como una semilla más. Las razones del crecimiento de las malas hierbas pueden ser debido a la mala calidad del terreno, a los daños producido por los insectos, animales, etc., a las condiciones climatológicas (por ejemplo, con el calor intenso pueden ayudar a crecer este tipo de malas hierbas, esto lo denominamos stress medioambiental). También, el mal uso o falta de mantenimiento podrían ayudar a que aparezcan esas malezas (la altura de corte, el riego, el abono, aireación…) y, por último, los daños físicos, como un pisoteo intenso, si la variedad no tolera esta característica.
Por el contrario, para evitar el crecimiento de las malas hierbas debemos seguir las siguientes pautas: la implantación de tepes de césped natural. Quizá sea el principal consejo para evitar las malezas debido a que hacen los tratamientos exhaustivamente; un corte adecuado (ni demasiado largo ni demasiado corto, aconsejamos que el corte sea de unos 3 centímetros, en verano la frecuencia de siega tendría que ser semanal); el riego y el abono han de ser acorde con el césped que tenemos; preparar el terreno con una base de mantillo mezclado con arena y tierra vegetal en unos 8-10 centímetros de altura; eliminar las malas hierbas nada mas que aparezcan para evitar que se desarrollen. Además, tenemos que ser precavidos durante todo el año. A pesar de que normalmente nacen en primavera y verano, deberíamos revisarlas en otoño e invierno. También podríamos evitar plagas y hongos en el césped (realizando medidas de prevención) ya que se haría más fácil luchar contra esas malas hierbas. Por último, realizando tratamiento con herbicidas.
Dentro de los herbicidas disponemos de dos clasificaciones, entre otras. Por un lado, los herbicidas sistémicos (penetran en la planta) y herbicidas de contacto (destruyen las hierbas ya que no deja realizar la fotosíntesis). Por otro lado, herbicidas preemergentes (de manera preventiva) y herbicidas postemergentes (se aplican posteriormente a su aparición). Para todo ello, emplee la dosis recomendada según las instrucciones de uso, airee el césped cuando esté compactado y no utilice los herbicidas con sol o viento, podría estropear nuestras plantas o el jardín de algún vecino.
En las instalaciones Agrocesped, S.L. dispone de un césped natural cuya variedad “trafic” es la que ofrece mayor resistencia frente a las malas hierbas. Además, la composición de estas semillas (festuca arundinácea, ray grass inglés y la poa pratensis) unido a los productos y fertilizantes que realizamos, hace que se adapte muy bien al clima, al pisoteo, a enfermedades, al terreno y a los hongos. De esta forma, podemos disfrutar de un jardín con un césped natural de calidad y libre de malas hierbas.
En resumen, para controlar las malas hierbas debemos seguir un pequeño plan. Primero, identificamos las malas hierbas. Segundo, vigilamos si entra o no en el césped, luego, gestionamos adecuadamente el jardín y, por último, seleccionamos el herbicida más completo para cada caso.